
"El problema fundamental no reside tanto en que haya sacerdotes que abusen sexualmente de menores, sino en que el Código de Derecho Canónico vigente, así como todas las instrucciones del Papa y de la curia del Vaticano, obligan a encubrir esos delitos y a proteger al clero delincuente. En consecuencia, los cardenales, obispos y el propio gobierno vaticano practican con plena conciencia el más vergonzoso de los delitos: el encubrimiento."
Pepe Rodríguez
VIVA BENEDICTO XVI Y VIVAN TODOS LOS HIJOS DE PUTAS QUE CONSIENTEN ESTAS ATROCIDADES CONTRA NIÑOS.
UNA VEZ MÁS LA IGLESIA CATÓLICA SE HA LUCIDO.